Como resultado de una de esas noches de insomnio creativo, quiero deciros que me gusta el
teatro tanto como el café, y reconozco que muchas veces me llevo al límite sólo para sentirme
viva.Parece fácil de entender, ¿no?.
He de confesar que para mí no lo es tanto. Me llamo Carlota, soy mitad mujer, mitad gato.
Vivo en Madrid, aunque muy enraizada a personas, olores y sabores que no están.
Hacer teatro y teatralizar la vida son mi lena, de hecho tengo más fuerza en un escenario que abajo.
Soy extremadamente sensible y me emocionan las pequeñas cosas, pero tiendo a parecer
arisca. A veces araño.
Adoro la gente que ve más allá de lo obvio, y esa extraña capacidad que tengo para
enredarme conmigo misma y pasar de un estado anímico a otro rauda y veloz.
No me comprendo. Tampoco lo intento.